#1 Where There's Smoke
Hay un dicho sobre dejar ir. Rylan Roberts sabe eso mejor que nadie. Él había dejado ir sus ambiciones, a su familia y —sobre todo— a ella. Había perfeccionado el arte de poner su pasado detrás de él y
aceptar el hecho de que la ciudad que quería dejar en su retrovisor era el lugar en donde iba a vivir hasta sus últimos días. Pero a veces el
pasado no desaparece simplemente. A veces vuelve para perseguirte.
Piper Jameson se convenció a sí misma de que se marchaba por todas las razones correctas. Había salvado a personas al marcharse; se aseguró de que no fueran contaminados por sus costumbres rebeldes.
Cuando su hermana pequeña le pide que vuelva a casa para despedirse de su madre enferma, ella se ve obligada a ver que las cosas no son siempre lo parecen. La gente que dejó atrás podría no haber sido
salvada en absoluto.
En la cantidad de tiempo que tarda una bala en viajar del punto A al punto B, Piper y Ryland tendrán que dejar a un lado sus sentimientos el uno por el otro y tomar una decisión. Forzados a huir con la hermana de Piper, empiezan a entender que el futuro que creyeron haber perdido nunca estuvo realmente perdido.